domingo, 29 de abril de 2012

Sed...

Lo miré de arriba abajo, recorría cada zona de su cuerpo, que hasta pude descifrar la forma de moverse, demasiado sexy y demasiado solos para ser verdad, pensé, controlada por aquellos demonios que andan dormidos en nosotros esperando la primera tentadora oportunidad para manifestarse con furor...